viernes, 1 de mayo de 2009

Diario de una casa encantada( Parte 3)



4 de abril


Ha pasado algo terrible.Ayer ,como mamá tardaba, subí a buscarla a su habitación,y la encontré sentada en medio de un charco de sangre.Bajé corriendo para avisar a papá, y éste, que mantenía una misteriosa y acalorada conversación con la mujer del pelo gris, que se llama Angela, y aunque no tardó ni un segundo en coger el coche e ir al pueblo a buscar al médico, cuando éste llegó, ya era demasiado tarde...mamá había perdido al bebé que esperaba.
Desde ayer, permanece sola en su habitación, sin querer ver a nadie.
Estoy escribiendo en la mesa del salón, y me ha parecido que los ojos pintados de mi abuela eran aún más azules que otras veces.No me gusta su media sonrisa.La forma en la que todavía parece dominar esta casa.


5 de abril

Esta madrugada ha vuelto a despertarme el llanto.Ya no consigue asustarme, tan sólo me inquieta.Y he vuelto al mismo lugar donde hace unos días encontré al bebé...¿y sabeis quien estaba allí...?
Bajo una toquilla gruesa y vieja, Angela, permanecía inmóvil en mitad del terreno, con la cabeza inclinada.
He querido dar media vuelta sin hacer ruido, pues esta mujer me pone la piel de gallina, pero ella ha dicho, sin siquiera volverse.
``Tú también lo escuchas,¿verdad?´´
Y no sé por qué no he podido emitir ningún sonido.
Angela se agachó, acarició la tierra y entró de nuevo en la casa, sin siquiera mirarme.Los lloros infantiles cesaron de inmediato.
No sé que está pasando, ni quien es ese niño, pero supongo, aunque sólo tengo doce años...que no se trata de un ser de carne y hueso.
Quería hacer algunas preguntas, y tuve que buscar el momento apropiado.
Esta tarde ,Angela estaba en la cocina, pelando hortalizas para la cena, y armándome de valor, y con una excusa tonta, pues papá no quiere que me relacione con ella, me he sentado a su lado,y la he observado fijamente.
¿Que quieres? preguntó con brusquedad.
Quiero saber a quien pertenece ese llanto.
No es asunto tuyo.
¿Entonces por qué yo también lo oigo?
Sus ojos rodeados de arrugas me han mirado, y sin dejar de pelar, después de dar un largo suspiro, me ha contestado.
Ese al que oyes es mi nieto.
¿Y por qué llora?¿Donde se esconde?¿Como ha podido llegar solo al jardín...?
Pero ella levantó una mano, deteniendo la conversación.
Eres una niña.No puedo explicártelo.Algún día lo entenderás.


10 de abril

No puedo creerlo, papá ha accedido a volver a Barcelona.Mamá todavía está muy débil y éste no es lugar para ella.Así que estoy haciendo mis maletas, contenta como nunca lo he estado, feliz de dejar este sitio, que me da escalofríos.
Papá ha cerrado la puerta de un golpe, se ha presignado, cosa que jamás hace, después ha cargado todos los bultos en el coche, y no ha vuelto a mirar atrás.
Yo sí, lo he hecho.Me he quedado apoyada en el repaldo del asiento trasero,y he visto como los árboles agitaban sus ramas, cómo las nubes se deshilachaban sobre la masía, y como una figura, pequeña y blanquecina, se asomaba tras los muros.






1 de mayo de 2oo9


Me llamo Ana Ruíz, y encontré este diario, escrito cuando era una niña, el día que volví a aquella vieja casa a cumplir la última voluntad de mi padre.
Apenas recuerdo nada de aquellos días, y me parece increíble haber olvidado completamente las escenas vividas, que hoy, tras leer las líneas de mi caligrafía infantil, empiezan a redibujarse como pedazos de un sueño.
He colocado una cruz de madera, en el punto exacto del jardín que mi padre describió en su lecho de muerte.
Y he notado un aliento, un golpe de aire templado, que ha removido mi cabello blanco.
Y fué entonces, y solo entonces, cuando mi conciencia empezó a poner orden en aquella amalgama de misterio...Como si las piezas flotantes de un puzzle maldito, encontrasen su lugar con delicadeza.
En esta ocasión,no miré atrás mientras me alejaba de aquella casa, pues una vez mi madre me dijo que no era bueno molestar a los muertos.
Y ahora decidme, lectores de esta historia, sin temor a ser juzgados, y bajo la promesa de que cuanto os he relatado es cierto...
Decidme, a pesar de vuestras dudas y de vuestros temores...
¿Creeis en los fantasmas?








5 comentarios:

  1. No me ha quedado muy claro quien era el que lloraba: el hijo de esa mujer, el hermano que no nació?
    Acaba un poco de repente ¿ya estabas aburrida o que?

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  2. Ay,esa perspicacia...se supone que el padre tuvo un hijo con una sirvienta al que nunca reconoció.
    ¿No se adivina?
    A lo mejor es que yo lo tenía tan claro que me quedé corta de pistas.
    Chao Ruchi

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  3. Tendré que releer con más tiempo y más despacio...demasiado profundo para leer con prisas y captar todos los matices...
    Saludos
    Raúl
    P.D.: Seguiré entrando con más tiempo...lo prometo

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  4. Uy, yo tampoco había caído. Pues sí que has terminado pronto el relato, pensé que tendría más miga. Y la cruz que clava la hija en el suelo era para señalizar la tumba de la abuela, en donde enterraron al feto...? También si la niña vuelve cuando ya es vieja, y encuentra el diario, es un poco raro que escriba en él una breve reseña porque sí... Qué criticona...

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  5. A ver...esto del blog es muy ingrato a veces,jajaja, es broma.
    La cruz la clava donde su padre le indica, o sea, en el punto donde enterraron a su hijo no reconocido.
    Y ella no escribe ninguna reseña, se supone que está contando la historia.¿Tres partes te parece corto?
    En fin, tus comentarios son siempre bienvenidos, ya lo sabes.

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Han pasado y han dicho